28 jun 2013

El cuaderno de Aroha, Francesc Miralles

FICHA TÉCNICA                    

         Título: El cuaderno de Aroha
         Autor: Francesc Miralles
         Editorial: Destino
         Formato: Tapa blanda con solapas
         Páginas: 152
         Precio: 13,95€
         Fecha de publicación: abril de 2013

Josan pasa las vacaciones de verano con sus padres en un hotel de la costa. Mientras trata de planificar el futuro inmediato, dedica su tiempo a leer libros de filosofía y a interrogarse sobre lo divino y lo humano. Durante una siesta fallida, encuentra bajo el colchón de su cama un diario como los que guardaba su abuela de su infancia. Sobre las tapas de cuero, alguien ha escrito con purpurina plateada: DIARIO DE AROHA. Fascinado con este hallazgo, Josan pasa los días siguientes leyendo el diario de una joven que, a punto de cumplir los dieciocho, dice odiar a sus adinerados padres y todo lo que ellos han dispuesto para su vida. Dentro del diario, Josan encuentra una fotografía. Detrás de ella, Aroha ha escrito: «Búscame y te encontrarás».

AROHA significa "amor" en maorí,
la lengua de los nativos de Nueva Zelanda.
AROHA es también una palabra japonesa que, 
entre otras cosas, significa
"te quiero".
Pero si lees AROHA al revés,
descubrirás otro significado igual de importante
que completa el anterior:
AHORA.

Sí, este es uno de esos libros que cogen tanta importancia como para saltarse la lista de reseñas pendientes. Sí, me ha gustado tanto que tenía que escribir esto.

No sabría deciros qué tiene  para que me haya llegado tanto. Aparentemente, en un primer vistazo o con solo un par de capítulos leídos, no parece que pueda ser tan... tan. Cuando lees detrás de cualquier novela "Un libro que no te dejará indiferente" ("Una aventura que nunca olvidarás", en mayúsculas, en este caso), piensas que es la típica frase que ponen para ganar lectores. Bueno, al menos es lo que pensé yo. No creo que esas frases funcionen de verdad, para qué mentir, así ni siquiera le di importancia. Ahora que he terminado con el libro, sé que tenía razón. Sé que tardaré mucho en olvidar a Aroha.

Este libro tiene un algo. Un algo que es la mezcla de la escritura, la filosofía que esconde y la historia. El hecho es que me ha gustado, aunque de una forma diferente. ¿Por qué diferente? No sé. Solo sé que es así.

Amar lo que es. No hay otro secreto.
[...]
Si quieres penetrar en el alma pura de Aroha, ama lo que es. El resto es tu propio lastre.

Josan es un chico que está de vacaciones con su abuelo. Da más datos de su vida, pero no se le da nada importancia a lo largo de la novela, por lo que yo he optado simplemente con quedarme con sus vacaciones. No hay un antes. Solo hay un post-Aroha. Un día, Josan encuentra un cuaderno debajo de su cama y decide leerlo y, al hacerlo, conoce a esa chica llamada Aroha tan misteriosa, inteligente y completamente hipnotizante. Hasta yo acabé babeando después de sus entradas. En serio, me cayó genial. Y bueno, él se enamoró.

Josan empieza a tratar a Aroha como un secreto, y eso poco a poco se vuelve una obsesión. Aunque tiene a más gente a su alrededor (su abuelo es un viejo verde que se ha ligado a una señora que tiene una hija de su edad, y él se pasa las tardes con ella), no puede dejar de pensar en ella. Siente cosas: celos, tristeza, curiosidad. Un poco de dolor. Quiere conocerla, quiere presentarse. 

Entonces no es platónico. Los amores platónicos nunca hacen daño.


Lo que no sabe Josan es que esa otra gente que pulula a su alrededor como quien no quiere la cosa también podría estar pasando por lo mismo que él. A veces es triste, ¿no? Cuando estamos tan centrados en lo nuestro que no vemos lo de los demás. Pero es algo que pasa.

Después de muchos golpes y de sufrir demasiado, he decidido amar a una persona que no me puede corresponder. Me gusta conservar este sentimiento y dosificar la tristeza hasta que se vuelve una sensación agradable, porque cuando no tienes esperanza de que te correspondan, todo resulta mucho más suave.

Me ha gustado, sobre todo, por los mensajes. Por los huevos de Pascua. Por un personaje con el que me he sentido muy identificada, aunque a veces tenía ganas de pegarle una bofetada: Muriel. (De todas formas tiene sentido, porque a veces también me pegaría bofetadas a mí misma). Es verdad que a veces era un poco pesada y me daban ganas de gritarle (sacando mi vena más de pueblo) "AONDE VAAAS, CHIIIICA", pero en el fondo me ha parecido un personaje de los de "ole, ole y ole". ¿Cómo te puede caer medio-mal y medio-bien una persona? Idk.

Me gustaría decir algo más, pero la verdad es que no sé qué podría añadir. El cuaderno de Aroha es una historia rápida y preciosa, no hay más. Es extraña, eso no puedo negarlo, y Miralles sabe cómo jugar con nuestra mente lo suficiente como para confundirnos, pero he de decir que eso no le quita encanto. Eso se lo da. Eso es parte de la clave.

Dadle una oportunidad a Aroha, chicos. Leed su cuaderno.

Lo mejor: El juego en el que te metes sin querer. Y, oh, el gran LOL que descubres el final.
Lo peor: No me importaría que hubiera desarrollado algunas cosas un poquito más. Ni que tuviera más páginas.



Extras:
Empieza a leerlo aquí.
Sigue al autor en Twitter: @frmiralles

Clary

3 comentarios:

  1. A ver, comentario exprés: me ha dado la impresión de que Aroha es la abuela de él.
    ¿Es o no es?

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    Respuestas
    1. ¿Por qué has pensado eso? Qué va :O

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    2. Porque encuentra el diario bajo la cama de su abuela y por "el gran LOL que descubres el final." jajajaja
      En serio, ha sido lo primero que me ha venido a la cabeza... ¡gracias por disiparme la duda >.<!

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